1. Integración con Infraestructura Existente: La implementación de LoRA puede requerir ajustes significativos en la infraestructura existente. Esto incluye la integración con pipelines de entrenamiento, herramientas de despliegue y sistemas de gestión de modelos. Adaptar la infraestructura para soportar la adaptación de baja rank puede ser un desafío, especialmente en entornos empresariales complejos.
2. Curva de Aprendizaje: La adopción de nuevas técnicas como LoRA implica una curva de aprendizaje para los equipos de desarrollo y científicos de datos. Esto puede retrasar la implementación y requiere inversiones en capacitación y educación.
3. Compatibilidad de Herramientas: No todas las herramientas y frameworks de aprendizaje automático están optimizados para soportar LoRA de manera eficiente. La falta de compatibilidad o soporte nativo puede ser un obstáculo significativo para su adopción.
4. Evaluación de Resultados: Medir y evaluar los beneficios de LoRA en comparación con otros métodos de adaptación puede ser complejo. Es necesario establecer métricas claras y comparativas para validar que LoRA ofrece mejoras significativas en el rendimiento o eficiencia del modelo.
5. Mantenimiento y Actualización: Los modelos adaptados con LoRA pueden requerir un mantenimiento y actualizaciones continuas para asegurar que sigan siendo efectivos a lo largo del tiempo. Esto incluye ajustes periódicos basados en nuevos datos y cambios en los requisitos de las tareas.
6. Escalabilidad: Aunque LoRA está diseñado para modelos de gran escala, la escalabilidad de su implementación en sistemas de producción aún puede ser un desafío. Asegurar que la adaptación de baja rank sea eficiente y efectiva en entornos de producción a gran escala requiere planificación y pruebas exhaustivas.